Saturday, March 01, 2008

Memorias de Adriano

No soy de los que afirman que sus acciones no se le parecen. Muy al contrario, pues ellas son mi única medida, el único medio de grabarme en la memoria de los hombres, y aún en la propia mía.


Por aquel entonces empecé a sentirme dios. No vayas a engañarte: seguía siendo, más que nunca, el mismo hombre nutrido por los frutos y los animales de la tierra, que devolvía al suelo los residuos de sus alimentos, que sacrificaba el sueño a cada revolución de los astros, inquieto hasta la locura cuando le faltaba demasiado tiempo la cálida presencia del amor. Mi fuerza, mi agilidad física o mental, se mantenían gracias a una cuidadosa gimnástica humana. Pero ¿qué puedo decir sino que todo aquello era vivido divinamente? Las azarosas experiencias de la juventud habían llegado a su fin, y también su urgencia por gozar del tiempo que pasa. A los cuarenta y cuatro años me sentía libre de impaciencia, seguro de mí, tan perfecto como mi naturaleza me lo permitía, eterno. Y entiende bien que se trata aquí de una concepción del intelecto; los delirios, si preciso es darles ese nombre, vinieron más tarde. Yo era dios, sencillamente, porque era hombre. Los títulos divinos que Grecia me concedió después no hicieron más que proclamar lo que había comprobado mucho antes por mí mismo. Creo que hubiera podido sentirme dios en las prisiones de Domiciano o en el pozo de una mina. Si tengo la audacia de pretenderlo se debe a que ese sentimiento apenas me parece extraordinario, y no tiene nada de único. Otros lo sintieron, o lo sentirán en el futuro.


Antinoo, obsesionado con la idea de que su amante, el emperador Adriano podría olvidarse de él, se ahoga. Adriano, obsesionado con el recuerdo de Antinoo, llena el imperio con su imagen petrificada.



Y Adriano mandó construir mil estatuas de mármol en su nombre.


La moral es una convención privada; la decencia, una cuestión pública;… Tengo que confesar que creo poco en las leyes. Si son demasiado duras, se las transgrede con razón. Si son demasiado complicadas, el ingenio humano encuentra el modo de deslizarse entre las mallas de esta red tan frágil. ...Cada hombre está eternamente obligado, en el curso de su breve vida, a elegir ...entre las delicias del caos y las de la estabilidad.

* * * * * * * * * * *
No desprecio a los hombres. Los sé vanos, ignorantes, ávidos, inquietos, capaces de cualquier cosa para triunfar, para hacerse valer, incluso ante sus propios ojos, o, simplemente, para evitar sufrir. Lo sé: soy como ellos, al menos por momentos, o hubiera podido serlo. Sólo en un punto me siento superior a la mayoría de los hombres: soy a la vez más libre y más sumiso de lo que ellos se atreven a ser. Casi todos desconocen por igual su justa libertad y su verdadera servidumbre.
Memorias De Adriano, Marguerite Yourcenar

16 comments:

Francisco Joaquín Marro said...

MALVADOO..ME LEISTE LA MENTE, JUSTO ETOY ESCRIBIENDO UN ARTICULO ENORME SOBRE MI MARGUERITE Y SU ADRIANO...BUAAAH!!
BUENO, A LO QUE IBA:
te invito a que cuentes en tu blog ocho cosas sobre ti. Yo recibí esta invitación y ya lo he hecho en el mío, y como tengo que elegir a ocho blogueros para mandársela pues he pensado en ti, y te he elegido. Las reglas del juego son:


1. Cada jugador cuenta 8 cosas de sí mismo


2. Además de las 8 cosas tiene que escribir en su blog las reglas, que son estas cuatro.


3. Por último tiene que seleccionar a otras 8 personas y escribir sus nombres/blog.


4. Por supuesto, no hay que olvidar dejarles un comentario de que han sido seleccionadas para este juego. No sé que clase d epremio den, seguro un vibr ultimo modelo aunque lo mas seguro sea un estupido boton para blogger, ejejeje
en fin, te recvomiendo participar
Un beso.

@ELBLOGDERIPLEY said...

Fue, es uno de mis libros: tan delicado, tan delicioso, tan lleno de matices, porque aborda el tema del amor entre nous les hommes (se nota que lo escribe una mujer)insípidamente, desde el punto de vista de que habla en realidad del amor de dos personas, una más madura y otra menos y trasciende la cosa gáyer como con elegancia, hondura...Me he leído tb sus "cuentos orientales" y "Alexis, el tratado del inútil combate", novela para la que me parece que era tal vez demasiado jóven.
A mí me ha dado por algo sicalíptico, que es grabarme un vídeo satírico-musical de la Naranjo: Sacar la Sardá que hay en mi será, y dejar un poco el arte y ensayo y lo elevado durante un tiempo...o igual vuelvo mi blog un blog de cine experimental durante un tiempo, quién sabe.

Tenía preparada mi entrada/crítica sobre las últimas pelis vistas basada en tu Post sobre pelis de 2007. Quería dar un enofoque nuevo, toy algo pre-asténico primaveral, y sí que había que hacer una Wikipedia profunda (mínima). Pero esa entrada aún queda pendiente, no te preocupes.
Besotes.

pon said...

Madre mía, he leído las Memorias de Adriano varias veces y cada vez es como si nunca lo hubiera leído, tanto matiz tenue......una joya.

Anonymous said...

Espero que no te moleste mi comentario.

Adriano fue un gran Emperador Romano. Llevó al Imperio hasta sus últimos confines en una época de esplendor que sería insuperable. Además de origen hispano, cosa que estoy seguro te agradará. Su figura era "bien valorada" (como se diría en una encuesta del CIS) por el ciudadano romano, excepto en su pasión por Antinoo, cosa que se consideraba una exageración, una muestra de extravagancia del máximo mandatario.

Y es que la sociedad romana aceptaba la homosexualidad como "entretenimiento", no como institución.

Un saludo.

guillo said...

He leido las memorias de adriano por tantas veces que no recuerdo ya el numero y he encoentrado miles de veces cosas y fraces diferentes para cada momento de mi vida, es casi una biblia una adorable pasion que no muere... a veces me pasa que ese libro me ayuda a leerme mas tiernamente y a perdonarme de todo lo humano que somos. Guillermo Felicidades por este recordatorio memorable de Marguerit Yourcenar

Vulcano Lover said...

y nos espia Antinoo desde el mármol, y desde la memoria, desde la nada. Nos espía y espía quienes somos, aún sin nosotros saberlo.

La semana pasada tuve la ocasión de ver uno de los más hermosos, el de los "musei capitolini". Aunque aquí, en el Prado tenemos otra copia bastante bonita.

Y qué sería de nosotros sin la belleza?

Santi said...

Andá, qué interesante, y qué dramático; él muerto, Adriano atormentado y su estatua por todo el imperio...

:) Mola :)

Marguerite Yourcenar escribe muuu bien. Hace poco leí una novela de ella, sobre un hombre casado, que cuenta su vida, sobre su homosexualidad y milagros..

Pero ese libro no me lo he leído. But I´ll do.


Un abrazo didáctico y adolescente

Tres_Leches said...

Era em Adriano fria a chuva fora
Jaz morto o jovem
No raso leito, e sobre o seu desnudo todo,
Aos olhos de Adriano, cuja cor é medo,
A umbrosa luz do eclipse-morte era difusa

Jaz morto o jovem, e o dia semelhava noite lá fora
A chuva cai como um exausto alarme
Da Natureza em acto de matá-lo.
Memória do que el´ foi não dava já deleite,
Deleite no que el´ foi era morto e indistinto.

Oh mãos que já apertaram as de Adriano quentes,
Cuja frieza agora as sente frias!
Oh cabelo antes preso p´lo penteado justo!
Oh olhos algo inquietantemente ousados!
Oh simples macho corpo feminino qual o aparentar-se um Deus à humanidade!
Oh lábios cujo abrir vermelho titilavaos sítios da luxúria com tanta arte viva!
Oh dedos que hábeis eram no de não ser dito!
Oh língua que na língua o sangue audaz tornava!
Oh regência total do entronizado cio
Na suspensão dispersa da consciência em fúria!
Estas coisas que não mais serão.
A chuva é silenciosa, e o Imperador descai ao pé do leito.
A sua dor é fúria,
Porque levam os deuses a vida que dão
e a beleza destroem que fizeram viva.
Chora e sabe que as épocas futuras o fitam do âmago do vir a ser;
O seu amor está num palco universal;
Mil olhos não nascidos choram-lhe a miséria.

Antínoo é morto, é morto para sempre,
É morto para sempre, e os amor´s todos gemem.
A própria Vénus, que de Adónis foi amante,
Ao vê-lo então revivo, ora morto de novo,
Empresta renovada a sua antiga mágoa
Para que seja unida à dor de Adriano.

Fernado Pessoa: Antinoo (fragmento)

Muegano. said...

Ahhh! Qué maravillosa lectura! Me lo leí hace ya bastantes años, y lo he tenido siempre presente desde entonces...
;)

Capri c'est fini said...

Interesantísimo libro y también muy interesante historia de amor, creo que un poco exagerada por el humo de la Historia, como ocurre en otros casos de amores antiguos. Sin embargo de esos mimbres Yourcenar hizo una obra maestra de la literatura biográfica. Buena recomendación e interesante blog, enhorabuena. Un saludo.

Javier said...

Una de las más bellas y perdurables historias de amor que han existido, tal es su fuerza que su eco nos ha llegado hasta hoy en día cargado de la misma fascinación y poder que debió tener en aquellos lejanos años.

Gracias por este retazo de historia que la mano de Marguerite Yourcenar supo plasmar de forma magistral en su "Memorias de Adriano"

CRISTINA said...

Bueno, confieso que no he leído el libro.
Pero desde luego, después de tu post y de los comentarios, me lo leo pero ¡ya!
¡¡¡Qué guapo Antinoo!!! ¿verdad?

Besos, mi querido Senses.

senses and nonsenses said...

cristina es que, como dice vulcano tan bonito como sólo él sabe hacer, Antinoo representa el ideal de la belleza, al menos para Adriano, que lo convirtió en un dios y lleno el imperio de estatuas con su imagen. este libro es una especial recomendación que no debes dejar pasar por alto. la primera vez me costó -demasiado joven-, ahora está entre mis imprescindibles para este viaje imposible. como dice pon, eliges cualquier fragmento y flipas, no se me ocurre decirlo de otro modo mejor. para algunos las Memorias de Adriano de la yourcenar son como una biblia. podía intuir, imaginaba, que entre ellos, algunos de vosotros.

tres leches, gracias por el poema de Pessoa, estuve a punto de poner un fragmento del poema dedicado a Antinoo. muchas gracias.

peterpsych, qué manía te ha entrado con los griegos y romanos... ni que los hubiera puesto alguna vez de modelo de algo, o de nada. de todas maneras, pienso que tu análisis es muy etnocentrista, no creo que podamos juzgar a los clásicos desde parámetros actuales, con nuestra moral y desde nuestra cultura.
existen en la blogosfera auténticos especialistas en el mundo clásico en general, y en particular en adriano y antinoo, ...a los que apelo, como para poder discutir contigo seriamente sobre lo que dices sobre el tema en el post de buñuel; pero no creo que entonces se plantearan los conceptos homo o hetero como en la actualidad; ni el amor, ni la familia existían tal como los entendemos hoy; y el matri-monio tenía que ver más, pienso yo, con comprar una madre -y los derechos de ésta sobre sus posesiones, los hijos-, como una parte más del patri-monio (posesiones del padre) del hombre.
así que, lo de siempre, la mujer en casa con la prole y el hombre guerreando y cantando: "volando voy, volando vengo... y por el camino yo me 'entretengo' ", por utilizar la misma expresión que tú. algunos ejércitos griegos estaban formados por parejas de amantes: Platón hablaba de esta cuestión como una manera de tener más valor en presencia del amado... me gustaría que alguien que sepa del tema pueda ilustrarnos. ...porque es que soy un osado al ponerme a explicar estas cosas.
seguramente es más pertinente hablar de activo o pasivo, no lo sé, pero el intercambio no era exclusivamente sexual, ...la transmisión de conocimientos, ...la posesión de la juventud y la belleza considerada como un regalo de los dioses. tienes mucha razón cuando dices que sólo se aceptaba socialmente cuando se daba entre un joven y alguien mayor. pero esto sólo pone de manifiesto que la moral y costumbres de cada época pueden cambiar muchísimo, hasta entrar en contradicción.

de todas maneras, me gustaría disculparme ante todos los que sabéis del tema. sé que sois muchos. podríais completar mucho mejor este post. yo sólo sé un poquito de mucho, y de todo, nada. ¡un atrevimiento!

un abrazo.
gracias por comentar.

Tres_Leches said...

18. Τὸν δ' ἱερὸν λόχον ὥς φασι συνετάξατο Γοργίδας πρῶτος ἐξ ἀνδρῶν ἐπιλέκτων τριακοσίων, οἷς ἡ πόλις ἄσκησιν καὶ δίαιταν ἐν τῇ Καδμείᾳ στρατοπεδευομένοις παρεῖχε. καὶ διὰ τοῦθ' ὁ ἐκ πόλεως λόχος ἐκαλοῦντο• τὰς γὰρ ἀκροπόλεις ἐπιεικῶς οἱ τότε πόλεις ὠνόμαζον• 2 ἔνιοι δέ φασιν ἐξ ἐραστῶν καὶ ἐρωμένων γενέσθαι τὸ σύστημα τοῦτο, καὶ Παμμένους ἀπομνημονεύεταί τι μετὰ παιδιᾶς εἰρημένον• οὐ γὰρ ἔφη τακτικὸν εἶναι τὸν Ὁμήρου Νέστορα, κελεύοντα κατὰ φῦλα καὶ φρήτρας συλλοχίζεσθαι τοὺς Ἕλληνας,
ὡς φρήτρη φρήτρηφιν ἀρήγῃ, φῦλα δὲ φύλοις,
3 δέον ἐραστὴν παρ' ἐρώμενον τάττειν. φυλέτας μὲν γὰρ φυλετῶν καὶ φρατόρων (φράτορας) οὐ πολὺν λόγον ἔχειν ἐν τοῖς δεινοῖς, τὸ δ' ἐξ ἐρωτικῆς φιλίας συνηρμοσμένον στῖφος ἀδιάλυτον εἶναι καὶ ἄρρηκτον, ὅταν οἱ μὲν ἀγαπῶντες τοὺς ἐρωμένους, οἱ δ' αἰσχυνόμενοι τοὺς ἐρῶντας, 4 ἐμμένωσι τοῖς δεινοῖς ὑπὲρ ἀλλήλων. καὶ τοῦτο θαυμαστὸν οὐκ ἔστιν, εἴγε δὴ καὶ μὴ παρόντας αἰδοῦνται μᾶλλον ἑτέρων παρόντων, ὡς ἐκεῖνος ὁ τοῦ πολεμίου κείμενον αὐτὸν ἐπισφάττειν μέλλοντος δεόμενος καὶ ἀντιβολῶν διὰ τοῦ στέρνου διεῖναι τὸ ξίφος, "ὅπως" ἔφη "μή με νεκρὸν ὁ ἐρώμενος ὁρῶν κατὰ νώτου τετρωμένον 5 αἰσχυνθῇ." λέγεται δὲ καὶ τὸν Ἰόλεων τοῦ Ἡρακλέους ἐρώμενον ὄντα κοινωνεῖν τῶν ἄθλων καὶ παρασπίζειν. Ἀριστοτέλης δὲ καὶ καθ' αὑτὸν ἔτι φησὶν ἐπὶ τοῦ τάφου τοῦ Ἰόλεω τὰς καταπιστώσεις ποιεῖσθαι τοὺς ἐρωμένους 6 καὶ τοὺς ἐραστάς. εἰκὸς οὖν καὶ τὸν λόχον ἱερὸν προσαγορεύεσθαι, καθότι καὶ Πλάτων ἔνθεον φίλον 7 τὸν ἐραστὴν προσεῖπε. λέγεται δὲ διαμεῖναι μέχρι τῆς ἐν Χαιρωνείᾳ μάχης ἀήττητον• ὡς δὲ μετὰ τὴν μάχην ἐφορῶν τοὺς νεκροὺς ὁ Φίλιππος ἔστη κατὰ τοῦτο τὸ χωρίον, ἐν ᾧ συνετύγχανε κεῖσθαι τοὺς τριακοσίους, ἐναντίους ἀπηντηκότας ταῖς σαρίσαις ἅπαντας ἐν τοῖς στενοῖς ὅπλοις καὶ μετ' ἀλλήλων ἀναμεμειγμένους, θαυμάσαντα καὶ πυθόμενον, ὡς ὁ τῶν ἐραστῶν καὶ τῶν ἐρωμένων οὗτος εἴη λόχος, δακρῦσαι καὶ εἰπεῖν• "ἀπόλοιντο κακῶς οἱ τούτους τι ποιεῖν ἢ πάσχειν αἰσχρὸν ὑπονοοῦντες."


Para hombres de la misma tribu o familia hay poco valor de uno por otro cuando el peligro presiona; pero un batallón cimentado por la amistad basada en el amor nunca se romperá y es invencible; ya que los amantes, avergonzados de no ser dignos ante la vista de sus amados y los amados ante la vista de sus amantes, deseosos se arrojan al peligro para el alivio de unos y otros.

Plutarco: Vidas Paralelas. Pelópidas

hermes said...

Desde que lo leí por primera vez hace ya un montón de años, lo tongo como uno de mis libros de cabecera, que de cuando en cuando lo saco y lo vuelvio a leer.

Gracias por ponerlo aquí, ha sido un feliz reencuentro.

Un abrazo

cuitláhuac said...

No sabía nada de este libro, lo cual me apena un tanto, pero ahora lo pondré en la lista de espera con un distintivo de "prioridad". Suena en verdad muy chido. Veré si puedo leerlo pronto.
Saludos